Santa Marta: Navidad y Playas
En Santa Marta pasamos navidad y la noche vieja, disfrutamos de las playas cercanas y de la autentica, también turística ciudad. Nos encontramos con Manu quien nos alcanza desde Barranquilla para compartir sus recomendaciones con nosotros. Con él vamos a unas playas preciosas y vemos unos atardeceres hermosos. De noche bailamos Salsa y Champeta (el baile típico de la costa colombiana) y disfrutamos del verano durante el invierno europeo.
Por la tarde el viento levanta la arena y pasamos por la ciudad con los ojos aguzados. Los restaurantes intentan atraernos con sus menús y paquetes (aún así nos parece todo muy caro), en la quinta avenida hay un mercado durante todo el día donde puedes comprar ropa, zapatos o fruta. Alguno que otro deja depilarse o pintarse la cejas en medio de la calle. De nuevo se abre un nuevo mundo delante de nosotros, en el que resuena el reggeaton de las tiendas de ropa durante todo el día y donde puedes comprar arepas, brochetas de carne y limonada fresca en los puestecitos.
Aún así podemos descansar un poco. Logramos no hacer nada durante varios días (también debido a nuestro estado físico después del tour de la ciudad perdida). Nos quedamos en casa y vemos una película – el día a día se siente raro cuando uno está viajando. En cada momento tienes la sensación de tener que salir a probar, conocer o experimentar algo. Nos soltamos y gozamos de los días tranquilos en Santa Marta.
Pasamos navidad los dos solos cenando muy rico en un restaurante francés. Después quedamos con Andi, el novio de una de mis mejores amigas, nos tomamos unas cervezas y vemos un poco de los típicos fuegos artificiales. En Colombia se abren los regalos el 24 a media noche y de todos lados suena música.
Los últimos días del año los pasamos con unos couchsurfers de todo el mundo – con ellos también quedamos para festejar noche vieja. El 1° de enero es un día raro en Santa Marta, todo está tranquilo, no hay ni música ni puestos de comida – solamente estás tú en la calle y el supermercado vacío. Nos damos cuenta de que los colombianos están en la playa, donde nadamos con miles de ellos.
Un poco antes de seguir nuestro viaje en Colombia nos vamos un día a Minca, una ciudad situada en el monte y cerca de Santa Marta. Desde aquí se pueden hacer caminatas, nadar en cascadas y baños naturales. No nos gusta demasiado. Los caminos son tan anchos que nos pasan coches y motos constantemente. La experiencia no es tan bonita y no podemos dejar de comparar todo con lo que hemos vivido en la ciudad perdida – aparte de que estamos todavía bastante cansados del tour. ¡Las cascadas sin embargo nos encantan!
¡Les deseamos a todos un feliz año nuevo, que sea maravilloso y lleno de muchas aventuras!
Próxima estación: ¡Medellín!